Oración de las Familias Educadoras en el Hogar – Por Nuestra Misión

“Los hijos son una herencia del Señor, los frutos del vientre son una recompensa” (Salmos 127:3)

Padre nuestro, te rogamos que enciendas en nosotros los Padres de Familia un celo santo por Ti y por nuestra descendencia, que con denuedo levantemos nuestra descendencia para Ti Dios Santo; trae revelación y convencimiento a tu pueblo de no compartir nuestra paternidad con “Faraón” ni con “el César”, de no compartir la herencia y recompensa que nos has dotado, pues lo Tuyo es Tuyo y es para Tu gloria.

Padre nuestro, te rogamos tu ayuda para que instruyamos a nuestros hijos como dice la Escritura: “Enseñarán a Mi pueblo a discernir entre lo sagrado y lo profano, y harán que ellos sepan distinguir entre lo inmundo y lo limpio”. (Ezequiel 44:23)

Permanece Padre Dios en nosotros y que nunca olvidemos que eres Tú quien nos has llamado a Educar a nuestros hijos en el Hogar, todo para Tu gloria y Tus propósitos.

“Tú me das tu protección; me salvas con tu gran poder y me concedes la victoria. Me despejas el camino para que no tenga yo tropiezos. ¡Viva el SEÑOR! ¡Bendita sea mi Roca! Sea ensalzado el Dios de mi salvación” (Salmo 18:35-36,46a TLA, RVA2015)

“No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que Él ha hecho.” (Filipenses 4:6)

Oramos para que nuestro camino de educar en el hogar a nuestra familia sea fructífero y esté lleno de paz, gozo y alegría.

Gracias amadísimo Padre celestial porque Tú nos has despejado y nos sigues despejando el camino a medida que avanzamos; y nos alientas para avanzar sin preocupaciones, sin cuestionarnos cada paso, avanzamos sin obstáculos imaginarios con la certeza de que no se materializarán en la realidad. (Génesis 43:23; Génesis 45:20; Mateo 6:25,31,34; Filipenses 4:6)

Líbranos Padre nuestro de hacer de la Educación en el Hogar un ídolo. Que siempre tengamos presente que nuestro Rey, Señor y Salvador es Jesucristo; y que la Educación en el Hogar es una asombrosa y poderosa herramienta que tú Padre nuestro nos has otorgado, y que es una asignación para la cual somos llamados para el propósito de criar, disciplinar y discipular a los hijos que nos has confiado.

“La lengua de los sabios hace que el conocimiento sea atractivo.” (Proverbios 15:2)

Oramos que como sabios padres y maestros de nuestros hijos hagamos que aprender sea grato y atractivo.

Oramos que como familia, crezcamos juntos en estatura, conocimiento y sabiduría espiritual.

Oramos que todo lo que hagamos o digamos, lo hagamos como representantes del Señor Jesús y demos gracias a Dios Padre por medio de Él. Y todo lo que hagamos, lo hagamos de corazón, como para el Señor y no como para la gente, porque ya sabemos que el Señor nos dará la herencia como recompensa, pues nosotros servimos a Cristo el Señor. (Colosenses 3:17,23-24 NTV, RVC)

Oramos que todo lo que nuestros hijos aprendan y sepan hacer sea instrumento poderoso en las manos de Dios para levantar generaciones piadosas y de carácter para la gloria de Dios.

Oramos por cada uno de nuestros hijos, que estudien, aprendan, crezcan en conocimiento, pues a medida que crezcan en sabiduría, sus palabras servirán como agentes de bien y no de mal, y en ellos se cumplirá el proverbio que dice, cuando “abre su boca hay sabiduría” y, “en su lengua está la ley de clemencia”. (Proverbios 31:26)

Oramos que nuestros hijos sean trabajadores competentes en el campo de labor para el cual Dios les ha ordenado.

Oh Señor Soberano, Creador del cielo y de la tierra, del mar y de todo lo que hay en ellos (Hechos 4:24) permite que nuestros hijos se maravillen con todo lo que has creado; que sus labios te alaben, que sus mentes reflexionen sobre tu maravillosa sabiduría, creatividad e imaginación, mismas que concedes a cada uno de tus hijos ¡para que estemos a tus pies! Te necesitamos en todo lo que hacemos, en todo lo que decimos, en todo lo que pensamos. Permite que te busquemos primero antes de planear cualquier cosa para que tengamos tu guía y tu bendición.

Oramos que por medio de la perfecta liberación del poder del pecado que nos ha dado ya el Mesías, en Su nombre y autoridad y para la gloria de Dios Padre, hagamos Su voluntad de ser fructíferos, multiplicarnos, llenar la tierra y someterla; ejercer potestad sobre las criaturas de los mares y las criaturas que vuelan en el cielo, y sobre todo ser viviente que se arrastra sobre la tierra (Génesis 1:28); en amor, fidelidad y en sujeción a Cristo y en Su nombre gobernamos sobre Su creación, para gloria de Dios Padre y para el bienestar de toda la humanidad.

Padre nuestro, te damos gracias porque nos otorgaste libertad para cumplir Tu mandato de trabajar con nuestros cuerpos y mentes, cultivar la tierra y maximizar sus bienes para nuestro bienestar, y nos has dado libertad para levantar nuestra descendencia para ti educando y discipulando a nuestros hijos conforme a Tu santa y sagrada voluntad, y por Tu propia autoridad y mandamiento nos proteges del mal. Gracias por el poder del Espíritu Santo que nos ayuda a criar y discipular a nuestros hijos y administrar nuestros hogares. Gracias amado Padre porque nada puede deshacer Tu ley eterna que protege las bendiciones que has decretado sobre nosotros para que cumplamos Tu santa y perfecta voluntad; ninguna voluntad espiritual o humana, ni la voluntad de ninguna cosa creada, ningún contrato social, ningún déspota o tirano, ni parlamento humano puede deshacer Tu ley. ¡Terrible cosa es caer en las manos del Dios vivo! (Génesis 1:28; Mateo 28:18-20; Deuteronomio 5:16; Deuteronomio 6:7; Deuteronomio 11:19; Hebreos 10:31)

“Y no adopten las costumbres de este mundo, sino transfórmense por medio de la renovación de su mente, para que disciernan, prueben y comprueben cuál es la voluntad de Dios, la cual es buena, agradable y perfecta.” (Romanos 12:2 RVC, RVA, EXB)

1. ORACIÓN POR VISIÓN Y PROVISIÓN

A. LA VISIÓN Y PLANES DE DIOS

Padre, tu Palabra dice “Yo, el Señor, enseñaré a todos tus hijos, y su paz se verá multiplicada”, y “Si el Señor no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican” y también dice “Puedes hacer todos los planes que quieras, pero el propósito del Señor prevalecerá”; por lo tanto te pedimos Tu visión y tus planes para la Enseñanza y Educación de nuestros hijos, te rogamos tu ayuda para ser vasijas dignas para enseñar y discipular a nuestros hijos conforme a Tu visión y buen plan. (Isaías 54:13 RVC; Salmos 127:1 NTV; Salmos 19:21 NBLA)

Padre, ayúdanos a darle importancia a lo eterno y a lo espiritual y síguenos urgiendo y fortaleciendo para prevalecer,  permanecer y vencer, como tus llamados, escogidos y fieles (Apocalipsis 3:21; Apocalipsis 17:14).

Ayúdanos Padre a mantener el equilibrio en nuestra vida recordando tu Palabra que somos extranjeros y peregrinos en este mundo y nos adviertes: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en Él.” Ayúdanos a manejar nuestro hogar, los estudios, la familia, el trabajo y todas las demás obligaciones. Cuando nuestra agenda se perciba saturada, asegúrate de que Tú estés en control y danos la energía para continuar hacia la meta del supremo llamamiento por medio de Cristo Jesús. (1Pedro 2:11; 1Juan 2:15; Filipenses 3:14)

Padre, ayúdanos para que la formación del carácter, los saberes y conocimientos que brindemos a nuestros hijos estén alineados con Tu santa voluntad, priorizados como conviene a tus planes y propósitos para sus vidas. Que pongamos nuestro esfuerzo y atención en aquello que dará buen fruto y no en las obras estériles e infructuosas que no convienen.

B. SABIDURÍA Y ENTENDIMIENTO

Padre, te pedimos que nos des espíritu de sabiduría y de revelación antes de emprender un nuevo tramo en nuestro Camino y una nueva estación, etapa y fase en nuestro hogar y vida familiar; te pedimos que nos llenes del conocimiento de Tu voluntad en toda sabiduría, inteligencia y entendimiento espiritual, para que podamos crecer en nuestro conocimiento de Ti. Te pedimos que nos des un completo entendimiento de lo que quieres hacer en nuestras vidas, para que la forma en que vivamos siempre te honre y te agrade produciendo toda clase de buenos frutos en toda buena obra. (Efesios 1:17; Colosenses 1:9-10)

Permítenos ver las necesidades específicas de cada uno de nuestros hijos, no sólo en su educación sino en sus necesidades espirituales, emocionales y en su vida en general. Danos sabiduría y creatividad para satisfacer sus necesidades. Que cuando les enseñemos, veamos dónde tienen dificultades en las áreas del conocimiento, la ciencia y el arte, pero también podamos ver cómo se ven a sí mismos y a los demás. Padre, ayúdanos a ver su bienestar espiritual, si están floreciendo o necesitan estímulo. Abre nuestros ojos a estas cosas porque a veces estamos distraídos u ocupados. Necesitamos tu ayuda mientras los formamos en su educación, y en su camino espiritual.

“Instruye al niño en el camino que debe andar, Y aun cuando sea viejo no se apartará de él.” (Proverbios 22:6)

C. GUÍA PARA TOMAR DECISIONES CORRECTAS

Padre, ayúdanos a tomar las decisiones correctas para nuestra familia con respecto a la educación en el hogar, los métodos y técnicas de enseñanza y las elecciones del plan de estudios e itinerarios. Te pedimos que nos guíes en el Camino correcto. Dinos claramente qué hacer, y muéstranos qué Camino tomar. Tal como Jesucristo nos enseñó con Su ejemplo, que así también enseñemos a nuestros hijos tomando en cuenta su etapa de desarrollo, su edad, su madurez, sus cualidades individuales y su estilo de aprendizaje. (Salmos 5:8; Mateo 13:54; Hechos 1:1-4)

D. FORTALEZA

Padre, Tú escudriñas nuestros corazones y aunque pudiésemos sentirnos muy débiles o inadecuados educando a nuestros hijos, Tu Palabra dice: «Diga el débil: “Fuerte soy”». Por lo tanto, nos alineamos con Tu Palabra. Creemos que Tú eres la Fuerza de nuestra vida, eres nuestra Luz y nuestra Salvación. Somos fuertes en Ti, Señor, y en el poder de Tu fuerza. Podemos hacer todas las cosas por medio de Cristo que nos fortalece. Gracias por Tu fuerza mientras educamos a nuestros hijos en el hogar. (Joel 3:10; Salmos 27:1; Efesios 6:10; Filipenses 4:13)

Padre, Tú miras y escuchas a nuestros detractores, a aquellos que tratan de hacernos titubear sembrando dudas y temores en nosotros para impedir que te obedezcamos y avancemos en Tu propósito para nosotros y nuestras generaciones, así como sucedió a tu siervo Noé. Tu nos dices en Tu Palabra: “Levántate, resplandece, porque ha llegado tu luz y la gloria del Señor ha amanecido sobre ti.” Así como dijiste a tu siervo Josué, Tú nos mandas que nos esforcemos y seamos muy valientes para obedecer tus instrucciones; que no temamos ni nos acobardemos porque Tú, YHWH nuestro Dios, estás con nosotros a donde quiera que vayamos. Y nos has prescrito que no se aparte de nuestra boca Tu palabra y que meditemos en ella y tus instrucciones de día y de noche, y así prosperaremos y triunfaremos en todas las cosas que emprendamos. Por lo tanto, nosotros confiamos y esperamos en Ti, y renovaremos nuestras fuerzas; volaremos alto, como las águilas; correremos y no nos cansaremos, caminaremos y no nos fatigaremos. (Isaías 60:1; Josué 1:6-9; Josué 1:7; Isaías 40:31)

E. PROVISIÓN FINANCIERA

Padre, Tú siempre eres fiel para suplir todas nuestras necesidades de acuerdo a tus riquezas en gloria por Cristo Jesús. Tú dices en Tu palabra que te saboreemos y veamos cuán bueno eres Tú; cuán dichosos somos los que confiamos en Ti. Te honramos con nuestras finanzas al dar con alegría. Creemos que Tú provees para nuestra familia, por lo tanto te entregamos nuestras preocupaciones, afanes, ansiedades y cargas por nuestras finanzas porque Tú sabes lo que necesitamos. Hemos determinado buscar primero Tu Reino y Tu justicia, sabiendo que todas las cosas que necesitamos (finanzas, comida, ropa, refugio, suministros, plan de estudios, etc.) nos serán dadas. (Salmos 34:8; Filipenses 4:19; 2 Corintios 9:7; Mateo 6:25, 33)

2. DESARROLLO DE NUESTROS HIJOS

A. APRENDIZAJE

Padre, te rogamos que ayudes a nuestros hijos a captar lo que necesitan saber y aprender. Te pedimos que les des la aptitud para el entendimiento y la sabiduría. Gracias porque tienen la mente de Cristo y gracias porque su memoria es bendecida. (Daniel 1:17, 20; 1Corintios 2:16; Proverbios 10:7)

B. CONOCIMIENTO Y ENTENDIMIENTO

Padre, te pedimos que ayudes a nuestros hijos a ser bien versados en Ti, en Tu Palabra y en cada rama del aprendizaje, dotados de conocimiento y buen sentido, y que sean rápidos para entender. (Daniel 1:4)

C. SABIDURÍA Y DISCERNIMIENTO

Padre, te pedimos que nuestros hijos lleguen a ser hábiles en toda sabiduría y discernimiento, y competentes para estar y servir en los lugares que Tú les asignes, aun cuando sean posiciones de liderazgo y autoridad. (Daniel 1:4)

D. HABILIDAD

Padre, te pedimos que le des a nuestros hijos habilidad, entendimiento, inteligencia y conocimiento. (Éxodo 31:3)

E. FAVOR

Padre, así como Yeshua creció en gracia y favor contigo y con la gente, te pedimos que nuestros hijos crezcan en gracia y favor contigo y con la gente. Te agradecemos que estén rodeados de Tu gracia, favor y benevolencia dondequiera que vayan. (Lucas 2:52; Salmos 5:12)

F. FORTALEZA

Padre, te rogamos que nuestros hijos se den cuenta y entiendan que pueden hacer todas las cosas a través de Cristo que los fortalece. (Filipenses 4:13)

G. MOTIVACIÓN Y DILIGENCIA

Padre, ayúdanos a brindar confort y ánimo oportuno a nuestros hijos cuando tengan un día difícil o enfrenten alguna aflicción. Que como padres sepamos y podamos consolar y aconsejar a nuestros hijos como es debido.

Padre, te pedimos que tu Espíritu Santo motive a nuestros hijos a trabajar diligentemente en todas las cosas, que sean conscientes de que todo lo que hacen es para Ti; que no se cansen de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharán si no se dan por vencidos. (Gálatas 6:9; Colosenses 3:17,23-24)

H. ENFOQUE Y ATENCIÓN

Padre, te pedimos que ayudes a nuestros hijos a escuchar y atender lo que es importante para Ti que atiendan. Ayúdanos a tener un ambiente beneficioso para su aprendizaje, que aprendan todo lo que Tú tienes para ellos. Te pedimos por la atención y enfoque de nuestros hijos, encomendamos a Ti todo lo que nuestros hijos hacen, que sus pensamientos sean afirmados, y se realicen sus proyectos; que se resistan a las distracciones alrededor de ellos. (Proverbios 16:3)

Que escuchen con atención, y entiendan, que miren bien y comprendan; haz sensible su corazón, despabila su mente, destápales sus oídos y abre sus ojos, que vean con sus ojos y oigan con sus oídos y que su corazón y mente entiendan, y se conviertan a Ti y sean sanados por Ti. (Isaías 6:9-13)

3. DISCIPULADO Y CARÁCTER DE NUESTROS HIJOS

A. FORMAR DILIGENTEMENTE A NUESTROS HIJOS

Padre, estamos decididos a formar a nuestros hijos en el Camino que deben seguir, sabiendo que cuando sean mayores no se apartarán de él. Ayúdanos a guardar Tus Palabras en nuestras mentes y corazones para que podamos enseñarlas e imprimirlas diligentemente en las mentes y corazones de nuestros hijos. Hablaremos de ellas cuando nos sentemos en nuestra casa, cuando vayamos por el Camino, cuando nos acostemos y cuando nos levantemos. Gracias por tu bondadosa ayuda. (Proverbios 22:6; Deuteronomio 6:6-7)

B. CORREGIRLOS Y DISCIPLINARLOS TIERNAMENTE

Padre, Tu Palabra dice: “Una negativa a corregir es una negativa a amar; ama a tus hijos disciplinándolos”. Te pedimos que nos ayudes a reflejar siempre Tu amor a nuestros hijos, mostrándoles continuamente el perdón y la misericordia. Ayúdanos a criarlos en la tierna crianza, el entrenamiento, la disciplina, el consejo y la amonestación de Ti. En el nombre de Jesús, amén. (Proverbios 13:24; Efesios 6:4)

4. ORACIÓN POR EL FUTURO DE NUESTROS HIJOS

A. OBEDIENCIA A LA VOLUNTAD DE DIOS

Padre, te pedimos que nuestros hijos se conformen a Tu voluntad en cada propósito, pensamiento y acción. Te pedimos que sigan Tu plan para ellos y practiquen habitualmente lo que te agrada. (1Juan 2:1; Juan 3:22)

B. QUE RECIBAN LA GUÍA DE DIOS

Padre, te pedimos que continúes guiando a nuestros hijos con Tu consejo, conduciéndolos a su glorioso destino. (Salmo 73:24)

C. CUMPLIMIENTO DEL PLAN DE DIOS

Padre, te agradecemos que tienes la vida de nuestros hijos planeada. Planes para cuidarlos y no abandonarlos, planes para darles una esperanza y un futuro. Creemos que nuestros hijos son obra tuya, creados en Cristo Jesús para realizar buenas obras para ti. Ellos vivirán la buena vida que Tú predispusiste y preparaste para que la vivieran. (Jeremías 29:11; Efesios 2:10)

5. RELACIONES DE LOS HIJOS

A. HONRAR A LOS PADRES

Padre, te pedimos que nuestros hijos nos obedezcan y honren como sus padres todos los días de su vida, para que todo les vaya bien y vivan mucho tiempo en la tierra. Esto te agrada. (Efesios 6:1; Colosenses 3:20)

B. CAMINANDO EN AMOR UNOS CON OTROS

Padre, Tu Palabra dice: “¡Qué maravilloso y agradable es cuando los hermanos conviven en armonía!” Por lo tanto, rogamos que nuestros hijos sean amables y cariñosos unos con otros con amor fraternal, honrándose y prefiriéndose unos a otros. Que nuestro hogar refleje siempre Tu amor y paz a todos los que entran. (Salmos 133:1; Romanos 12:10)

¡Kadosh, Kadosh, Kadosh, eres YAHWEH -Tzevaot! ¡Toda la tierra está llena de Tu Gloria! Refrena nuestra lengua, purifica la inmundicia de nuestros labios, que hablemos palabras de vida eterna, que edifiquen y te den honra. Padre, pon un guarda en nuestra boca, guarda la puerta de nuestros labios. Que no pequemos aún si nos airamos o nos decepcionamos; que no se ponga el sol sobre nuestro enojo sino que nos reconciliemos en tu misericordia, gracia, piedad y amor con prontitud. (Salmos 141:3; Isaías 6:1-7; Efesios 4:26)

C. AMISTADES Y RELACIONES PIADOSAS

Padre, te pedimos amigos piadosos y leales para nuestros hijos. Amigos que amen la pureza, que sean puros de corazón, y tengan gracia al hablar, amigos que los pulan y los amen en todo momento. (Proverbios 17:17; Proverbios 22:11; Proverbios 27:17)

6. ORACIONES GENERALES POR LOS HIJOS

A. PAZ

Padre, te rogamos que todos nuestros hijos sean discípulos enseñados por Ti y obedientes a Tu voluntad, y que su paz sea multiplicada, plena y abundante. (Isaías 54:13)

B. SANIDAD Y SALUD

Padre, de acuerdo con Tu Palabra, Jesús mismo fue herido en Su cuerpo para que pudiéramos ser sanados. Él tomó nuestras dolencias y llevó nuestras enfermedades. Por lo tanto, te agradecemos por sanar a cada uno de nuestros hijos. Creemos que son sanados y continúan experimentando una excelente salud en la vida. (1Pedro 2:24; Mateo 8:17)

C. MENTE SANA Y SIN MIEDO

Padre, gracias porque no has dado a nuestros hijos un espíritu de temor, sino de poder y de amor y de dominio propio con una mente sana. Te pedimos que los llenes de Tu paz (shalom) que sobrepasa todo entendimiento y toda inteligencia, guarda sus corazones y pensamientos. (2Timoteo 1:7; Filipenses 4:7)

D. PROTECCIÓN

Padre, te agradecemos que nuestros hijos habitan en el lugar secreto del Altísimo y permanecen bajo la sombra del Todopoderoso. Tú eres su refugio, su fortaleza, su Dios, en Ti confiarán. Ningún mal les sobrevendrá, ni ninguna plaga se acercará a su morada. Tú das a Tus ángeles el encargo de guardarlos en todos sus caminos. Te invocan y Tú les respondes. Tú estás con ellos en la angustia y los libras. Con una larga vida los satisfaces y les muestras Tu salvación. (Salmos 91)

 

{ DESCARGA EL PDF DE LA: Guía de Oración e Intercesión por las Familias Educadoras en el Hogar y la Educación en el Hogar }

Oración por las Familias Educadoras en el Hogar

Leave a comment